jueves, 24 de noviembre de 2011

Mi soledad y yo


La ilusión nació como lo hizo el universo: en plena explosión. A mí, las cosas que van deprisa siempre me han dado reparo. El descontrol es igual a incertidumbre, a bajar una cuesta sin frenos. Sin embargo, me encantaría vivir en constante vértigo, intranquila, desconcertada. Y puede sonar contradictorio, pero en mi mente está todo sistemáticamente organizado: tengo miedo a sufrir, pero si el riesgo a sufrir desaparece es porque todo lo demás se desvaneció también.Y hay momentos en los que creo no sentir nada, ni miedo, ni riesgo, ni ganas, ni ilusión. Y, en plena oscuridad, intento buscar la cerilla que enciende la vela que nació de las llamas... sin éxito.Será que necesito oxigeno para que prenda, para prender yo misma. 


No somos Eva ni Adán, no encontramos manzanas prohibidas, pero pecamos de todas maneras.

2 comentarios:

  1. Encaja perfectamente con como me siento en estos momentos...yo también necesito que alguien "me prenda"

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  2. Este sábado te prendo con Love Actually, no te preocupes, grrrrr! :3

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