domingo, 16 de octubre de 2011

If you don't wanna love me.


El bucólico paisaje de su cuerpo me llevó hasta la sinrazón, la conciencia de su último beso terminó con mi memoria. Los mejores años de esta vida, de la mía, se perdieron por el camino a sus labios, a esos labios envenenados de tanta dulzura.
Mis manos, hechas de caricias bajo la piel, ahora secan mi cara.
Cuántas lágrimas concentradas en las palmas...
Y me pregunto si habrá límite de salinidad lacrimal, si el mar es únicamente el llanto más largo de este mundo. 

Purifica este alma, vierte tu arrepentimiento en mí y envíame una sugerencia, una señal de que no debo empezar a olvidarte y juro que, a pesar de lo dicho, abandono mi coraje para acompañar a tu oportunidad. 

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